Fundamentados en el derecho a la protesta, se toma la "gran idea" de invadir un ícono de la ciudad para llamar la atención de los diferentes sectores de la sociedad caleña, se vandaliza "un poquito" con pintura en aerosol, y doña Herminia que va todos los dias justo a esa iglesia a rezar tiene que dejar de hacerlo.
Por lo menos no es una iglesia gótica de verdad, esta es una imitación a lo pueblito paisa hecha de concreto pero es un ícono/iglesia/chiquita así que por respeto a Doña Micaela Castro, a nuestros mayores, a los caleños que tomaron accion para recuperar su campanario y que ahora NO entienden ni aceptan sus razones había que buscar otro lugar... este no era ya que era de los únicos ejemplos de trabajo mancomunado de caleños en estos años, el otro es el Cuerpo de Bomberos Voluntarios, ahora media ciudad los odia y el que pensaba que era justa la protesta replantea su posición.
La cagaron... que pena, así no era.
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